jueves, 10 de mayo de 2012

MotoGP Estoril

Justo cuando se lo he recomendado a mucha gente para el año que viene, va y me dicen que este año ha sido la última carrera de MotoGP en Estoril - por eso las entradas eran tan baratas-. En fin, nos quedamos con la experiencia de haber vivido las últimas carreras en este autódromo, ahora ya histórico.

Salimos de casa el viernes bien cargados de provisiones para todo el fin de semana, que si la tienda de campaña, el saco, la cama hinchable, las míticas y deliciosas Papas J.García (gracias mamá), tortilla de patata, tortilla de champiñones, latas de atún, aceitunas y pimiento rojo asado para unos buenos bocadillos, embutido, salsita de tomate triturado con ajo ... no nos olvidamos ni del desayuno, ni de los "combinados" para la noche. No teníamos un plan claro, sólo teníamos la entrada para el domingo.

El primer día vimos los entrenamientos desde fuera. Sí, sí, este circuito no está cercado por un muro de hormigón, sino por unas rejas muy cómodas para ver a los motoristas desde bien cerquita:



Stoner
Lorenzo



Rossi
 

Estas imágenes son de la primera curva después de la recta de salida.

Nosotros súper contentos con nuestra posición pero claro, siempre hay gente con más experiencia. Este grupo de portugueses plantaron la caravana enfrente, subieron dos sillas al techo y palco perfecto:

Nivel Experto:
El de la izquierda posa para nuestra cámara y todo

En el intervalo de una carrera a otra fuimos a recoger nuestra entrada del domingo y a comprar una para el sábado. Como no había mucha gente en la grada A dejaban pasar a la gente sin pase. Así que estuvimos viendo un rato a los de moto2 desde aquí:



Esa noche decidimos dormir en el camping Orbitur Guincho, a 10 minutos del autódromo. Buena elección a pesar de la "juerga flamenca" que se marcaron los moteros más jóvenes del camping. A la mañana siguiente duchita y de nuevo hacia el autódromo.
El sábado estuvimos sentados en la grada H, con muy buenas vistas y unos asientos cómodos para pasar allí todo el día:





Menos mal que se puede entrar la nevera y todo el "ajuar" de comida. Estábamos como en la terraza de casa, pero acompañados de mucha gente.


Después de las carreras entramos en la grada E (entradas del domingo)para estudiar qué lugar nos convenía más. Tras decidirlo dimos una vuelta por fuera del recinto para ver el ambiente y comprobamos que había acampados y caravanas por todas partes. Todos muy bien equipados.
De ahí fuimos al centro comercial a por más provisiones y volvimos al circuito. Dejamos el coche bien aparcado, cenamos tranquilamente y para rebajar la cena dimos un paseo acompañados de nuestros cóckteles:

CaipiFresa

Y a dormir prontito que a las 7:30 abrían las puertas y no queríamos que nos quitasen "nuestro sitio". A las 7:20 ya estábamos sentados. Menos mal que a Lucas se le ocurrió preparar todo el picnic la noche anterior. Desayunamos nuestro galao con galletas y a esperar.

La mañana pasó rapidísima, y nosotros disfrutamos mucho viendo todas las carreras. Los adelantamientos en moto2 y moto3, alguna caída, moviendo nuestra banderita de Castellón a ver si nos enfocaba el helicóptero, comentando la jugada con el vecino, oyendo a los españoles, viendo a la afición gritar, emocionarse. En definitiva, un gran fin de semana motero muy económico, diferente y divertido. Una lástima que haya sido la última. 










martes, 8 de mayo de 2012

Fortaleza de Peniche

 
Fortaleza de Peniche (entrada)

La Fortaleza de Peniche (1557-1645) merece especial atención dado que ha sido muy relevante en la historia de Portugal.

Se construyó  para defenderse de los constantes ataques de corsarios ingleses, franceses y piratas Bábaros. La fortaleza de Peniche junto con el Fuerte de Consolação (sur de Peniche) y el Fuerte de São João Baptista en las Islas Berlgenas (oeste) formaban una composición estratégica defensiva supuestamente impenetrable. 
 
Forte de Consolação


Sin embargo, las tropas napoleónicas e inglesas supieron como penetrar en la Fortaleza de Peniche e invadirla.

Poco a poco fue perdiendo su función meramente defensiva, adaptándose a las necesidades y vicisitudes históricas de cada época. De modo que su su funcionalidad ha pasado por todos estos ámbitos:


Celdas

- Hasta 1897 fue de uso militar con una importancia estratégica vital.

- A principios del s.XX fue refugio de los Boers procedentes de África del Sur.

- Fue residencia de prisioneros alemanes y austríacos durante la Primera Guerra Mundial.
 
- Entre 1934 y 1974 fue prisión política del Estado Nuevo bajo la dictadura de Salazar (los presos vivían en celdas que frecuentemente se inundaban por la marea).

- El 25 de Abril de 1974, la revolución de los Claveles, fue uno de los puntos clave de los revolucionarios.

- A partir de 1974 alojamiento provisional de famílias portuguesas llegadas de las antiguas colónias.

- Desde 1984 alberga el Museo Municipal de Peniche, en el cual se exhibe material arqueológico, histórico y etnográfico (encaje de bolillos, piezas de pesca y de construcción naval). También hay una reconstrucción de lo que era el parlatorio y las celdas individuales de la prisión política durante el Estado Nuevo.



- Hoy en día se puede visitar parte de las instalaciones y contemplar las vistas del Puerto, de la playa de Supertubos y del Fuerte de Consolação.




 Vistas al puerto y a la muralla suroeste de la fortaleza


 La fortaleza tiene una estructura abaluartada, su planta tiene forma de un polígono irregular estrellado. La defensa se completa por un foso en la parte que da a la ciudad. El conjunto está integrado por el llamado Baluarte Redondo, Torre Vigia y la Capilla de Santa Bárbara.



Baluarte redondo
(debajo hay celdas)

Capilla Santa Bárbara





















A pesar de ser considerada una prisión de máxima seguridad durante la dictadura de Salazar, se conocen varios casos de fugas, los más destacados son el de Antonio Dias Lourenço que consiguió escapar serrando la puerta de la celda y descendiendo hasta el mar con una cuerda hecha de mantas rasgadas. Y el otro caso conocido popularmente como la "Fuga de Peniche", en el que 10 presos consiguieron escapar gracias a la ayuda de un guardia, que durmió a su superior con cloroformo. El guardia los cobijó bajo su capa hasta un punto oscuro de la muralla. De ahí descendieron hasta el mar con una cuerda de hecha con sábanas. En ambos casos todos salieron con vida nadando hacia la costa.